Estamos ante uno de esos momentos en la industria farmacéutica que se puede calificar de “punto de inflexión”. Los cambios pueden llegar, producirse o gestarse por mil causas (variaciones en los hábitos de consumo, modas más o menos pasajeras, incorporación de nuevas tecnologías, etcétera) y ser más o menos traumáticos, bienvenidos o incluso muy esperados. En el caso que nos ocupa, la causa del cambio es, ni más ni menos, la ley.
Y es que, como bien sabrán nuestros lectores, el 9 de febrero se publicó en el DOUE, el Diario Oficial de la Unión Europea, el Reglamento Delegado (UE) 2016/161 de la Comisión, en virtud del cual, desde esa fecha y en un plazo de tres años, todos los laboratorios farmacéuticos tienen la obligación de implantar sistemas de identificación individual y serializada de los envases de medicamentos de uso humano. Según el reglamento, “debe poderse identificar y verificar la autenticidad de cada envase de un medicamento durante todo el tiempo que se mantenga en el mercado, más el tiempo adicional necesario para la devolución y la eliminación del envase tras su caducidad”. Ello implica la inclusión de una serie de datos en el envase secundario que, sin duda redundarán en la seguridad del paciente y ayudarán a combatir la falsificación, pues será posible controlar el medicamento desde su origen hasta su venta en farmacia, pero que va a exigir importantes adaptaciones en las líneas de producción y acondicionamiento de los laboratorios, que más que nunca van a tener que ir de la mano de sus proveedores de packaging y equipamiento de impresión, codificación y marcaje.
Se trata, pues, de un proceso arduo, técnicamente complejo, que va a contribuir a dinamizar a los más relevantes actores de la industria y, nuevamente, a poner en marcha la -más que acreditada- locomotora de innovación que es el mundo del packaging.
Desde esta tribuna nos gustaría tranquilizar a los laboratorios farmacéuticos: están en buenas manos. Los proveedores de productos y servicios relacionados con el envase, ya sean impresores y/o convertidores de prospectos, estuches, etiquetas, suministradores de equipos de codificación y marcaje, proveedores de software, etcétera, les acompañarán en este tránsito con sobrada profesionalidad y conocimientos, ayudándoles a alcanzar una meta, que si bien hoy se vislumbra lejana y difusa, llegará en 2019. Los deberes deben estar hechos.
El dossier de farmacia que ofrecemos en este número trata de ofrecer, desde diferentes ópticas, las claves para ayudar a los laboratorios a definir su estrategia en este camino. Contamos, asimismo y en portada, con el conocido laboratorio KERN Pharma, con cuya directora del Área de Supply Chain, Sensi Maillo, charlamos para conocer de primera mano no sólo sus inquietudes y avances en lo relativo a la normativa europea, sino en todo lo relacionado con el packaging.
Javier Romero
Fundador de Infopack
@RevistaInfopack